Plan nutricional: principales dificultades

Hay diversos factores que complican el apego al plan nutricional, llevando que a menudo los pacientes se pregunten:

¿Por qué es tan difícil?

¿Cuáles son los principales retos? 

¿Cómo incrementar la posibilidad de lograrlo? 


En este artículo abordaremos algunas de las complicaciones que se presentan y cómo resolverlas. 

Se ha identificado que los pacientes que acuden a consulta, les resulta difícil apegarse a su plan nutricional a causa de:

  1. Falta de tiempo
  2. Desorganización
  3. Porque no son los encargados de preparar sus comidas
  4. No reciben un plan de alimentación sostenible y/o personalizado a sus gustos, costumbres, alergias alimentarias, entre otros
  5. Carencia de apoyo adecuado de su familia o personas cercanas
  6. No tienen claro los beneficios que obtendrán y del tiempo que toma llegar a ellos

Es importante entender por qué resulta difícil cumplir los objetivos de cada persona ya que eso permitirá al profesional de la salud realizar un plan más personalizado. 

Influencia de los pensamientos en el seguimiento del plan nutricional

Además de las dificultades propias de llevar a cabo lo anterior, existen algunas que se generan a raíz de la forma de pensar de cada paciente.

Conoce algunos ejemplos de pensamientos que impiden el apego al plan alimenticio:

 

  • Pensamientos que disminuyen la confianza en ti mismo después de haber comido algo no permitido dentro de tu plan alimenticio:
    Esto nunca va a funcionar, para qué seguir con este esfuerzo, no soy capaz, mejor ya lo dejo.”

  • Pensamientos que incrementan el nivel de estrés. Estos tienen metas poco realistas y es frustrante no avanzar de acuerdo a parámetros:

    “Tengo que cumplir perfectamente con mi plan de alimentación, tengo que verme como los influencers de las redes sociales, mis platillos siempre tienen que lucir bonitos, etc.”

  • Pensamientos que te hacen no poner en práctica las habilidades que te comparten los profesionales:
    “No necesito poner en práctica las estrategias, llevar un registro es inútil, no estoy viendo resultados rápidamente.”

  • Pensamientos limitantes o distorsiones cognitivas:

    “¿Y si no funciona? ¿y si no lo logro?” Si quieres saber más acerca de este punto, checa este artículo.

¿Qué puedes hacer?

Un gran paso a considerar para afrontar estas dificultades es hablar honestamente con tu nutriólogo.

Puedes platicarle sobre tu estilo de vida, tus horarios, las actividades cotidianas, qué preocupaciones tienes y los obstáculos a los que te enfrentas a diario para generar un cambio realmente sostenible. 

Además, el trabajo interdisciplinario con un terapeuta te facilitará modificar estos pensamientos negativos por otros más funcionales que te permitan tener mayor disciplina, mejorar tu confianza en ti mismo, así como sentirte mejor física y emocionalmente.

Recuerda...

Acudir con un nutriólogo es un acto de autocuidado, no un castigo. Obtén acompañamiento multidisciplinario y comienza a vivirlo de manera diferente.

¡Estamos contigo! 

plan nutricional
Nutrióloga Mayret Muñoz
Licenciada en Nutrición

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