¿Victimizarse es una forma de manipulación?

Victimizarse se refiere a un patrón de comportamientos que utilizan algunas personas para culpar a los demás y así, evitar asumir su responsabilidad.

Cuando una persona se victimiza, utiliza esta estrategia para obtener ventaja de una situación. 

En ocasiones se asume el rol de víctima de manera inconsciente como parte de un mecanismo de defensa que nos protege de vivir situaciones que nos generan dolor o nos hacen sentir vulnerables.

Una persona que se victimiza

  • No se responsabiliza: culpa de sus problemas personales a factores externos.
  • Tiene relaciones problemáticas: sus vínculos están marcados por el chantaje emocional y la manipulación dado que el otro siempre es el culpable de lo “malo” que le pasa.
  • Se queja constantemente: se lamenta de lo que sucede pero no toma acciones en concreto para resolver los problemas.
  • Tiene baja autoestima: la percepción que tiene de sí mismo es negativa así que tiende a buscar validación externa constantemente.
  • Busca un salvador o protector: siente que necesita que alguien le resuelva sus problemas, se mantiene con una actitud pasiva y recurre a victimizarse cuando el otro no está disponible.

¿Cómo puedo dejar de victimizarme?

Como previamente hemos mencionado, puede ser que lleves a cabo esta práctica de manera inconsciente. Sin embargo, cuando reconozcas que estás victimizándote, te recomendamos: 

  • Asumir tu responsabilidad: identifica el momento en el que quieras culpar a los demás de lo que te está sucediendo y hazte cargo de lo que te corresponde. Puedes proponer alguna solución que favorezca a ambas partes, lleguen a acuerdos.
  • Cambiar tu perspectiva: Enfócate en todas esas cosas que te han salido bien en lugar de solo ver tus fracasos. Transforma tus pensamientos, en vez de “todo me sale mal” intenta con “intentaré ser mejor en lo que haga”.
  • Pon en práctica el autoconocimiento: Haz una lista de aquellas fortalezas que te caracterizan, las que te hacen auténtico y capaz de afrontar cualquier situación.
  • Reflexionar: cuando distingas que estás utilizando la manipulación como una técnica a tu favor, puedes hacerte preguntas cómo:
    -¿Por qué lo estoy haciendo?
    -¿Qué quiero obtener a través del chantaje?
    -¿A quién estoy lastimando con esta acción?

Además de lo anterior, te recomendamos iniciar un proceso terapéutico donde haya un profesional que te guíe en este nuevo camino. En CuidadosaMENTE tenemos un equipo de psicólogos listos para acompañarte.

Cambiar patrones de pensamiento y comportamiento lleva tiempo así que se paciente. 

Rocío Maldonado
Psicóloga clínica

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *