EL ARTE DE LA VIZUALIZACIÓN

El arte de la visualización no consiste solo en imaginar. Visualizar es decirle a tu mente lo deseas lograr o experimentar para que de este modo se enfoque en encontrarlo tanto a nivel consciente como inconsciente. Se trata de una práctica que ha sido utilizada desde hace siglos e involucra tanto la mente como el cuerpo.

Todos los días de manera habitual realizas ciertas actividades que te resultan familiares y rutinarias, entre esas actividades, seguramente sin darte cuenta, también tomas varios minutos de tu día imaginando. Estos pensamientos pueden llegar por sí solos a tu mente, pero también es muy posible que tu propicies esa imaginación con cosas que quieres obtener, como comprar un coche, o una casa, conseguir un ascenso en tu trabajo o lograr ese título universitario que tanto deseas. Todo esto puede ser logrado mediante la visualización. ¿Increíble verdad?

La visualización va mucho más allá de la imaginación. Cuando imaginamos, muchas veces lo hacemos sin darnos cuenta, pero visualizar se realiza de forma consciente, atrayendo a la mente la imaginación.

Nuestro cerebro entiende la imaginación como algo real. Si imaginas cosas felices o agradables para ti, sentirás felicidad, quizá hasta sientas ganas de reír. Es decir, que la imaginación se transforma y se materializa en algo real. Y es esta la clave de la visualización, porque estas preparando a tu mente y tus emociones para conseguir en la realidad todo aquello que deseas.

Al practicar la visualización tu cuerpo experimentará una disminución de estrés y ansiedad encontrando mayor plenitud física y emocional e iniciando un ciclo de bienestar.

¿Te animas a practicar?

Para comenzar esta practica deberás tener en cuenta los siguientes puntos:

 

VISUALÍZATE EL PRESENTE

Si visualizas siempre el futuro, realmente será difícil que consigas lo que te propones, porque estará en el futuro. Debes visualizarte en el presente como si ya tuvieras eso que deseas, de esa manera estarás más cerca de conseguirlo. Claro, no podemos obtener eso que visualizamos en este preciso instante, pero de eso no trata la visualización, sino de preparar y crear las herramientas para conseguir aquello que visualizas.

 

ELIMINA LOS PENSAMIENTOS NEGATIVOS DE TU VISUALIZACIÓN

Es muy común que mientras estás visualizando te lleguen pensamientos negativos, por eso te recomendamos que no les prestes atención, intenta focalizarte en otros pensamientos más positivos y así cada vez, para que con la práctica puedas ir aprendiendo a controlar la aparición de estos pensamientos permitiendo que sean los positivos los que dominen tu visualización.

 

IMAGINAR NO ES LO MISMO QUE VISUALIZAR

Lo hemos comentado antes, pero es preciso profundizar este punto. Imaginar no es lo mismo que visualizar porque visualizar es un proceso, y como todos los procesos es necesario que le dediques tiempo, constancia y disciplina. Necesitas estar en calma y comenzar con ejercicios pequeños, hasta que con el tiempo puedas visualizar acciones o situaciones más complejas.

 

SIENTE TUS EMOCIONES

Uno de los pasos más importantes es que sientas lo que estás visualizando. Permítete sentirte feliz por lo que deseas y visualizas. Cuando realices este paso, intenta mantener una imagen clara de lo que deseas y siéntelo con todo tu ser. No olvides que el objetivo es desear cosas positivas, por lo que las emociones que te permites experimentar también deben ser positivas.

 

SE PACIENTE

Las cosas no se obtienen de manera inmediata, es necesario poner empeño y tiempo para conseguir lo que deseamos. La visualización requiere que tengas claridad en tus ideas y en lo que estás buscando experimentar. Intenta verlo como un proyecto que poco a poco estás construyendo y sé constante.

Visualizar es una práctica que dominarás con el paso del tiempo. No desesperes. Las cosas buenas en ocasiones no suceden inmediatamente sino que es nuestra perseverancia y nuestra energía lo que atrae cosas positivas hacia nosotros.